La más valiosa fue esta: la polluela pintoja (Porzana porzana), ¡Bimbo! mi primera observación de esta ave.
Aunque ya los tengo bastante fotografiados no me resistí a sacarle unas cuantas instantáneas a los calamones (Porphyrio porphyrio) y avetorillos (Ixobrychus minutus).
En el bebedero de Andratx fue poner agua y esperar. Las sorpresas no se hicieron esperar.
El papamoscas cerrojillo (Ficedula hypoleuca) no faltó a su anual encuentro en el bebedero. A éste le encanta bañarse.
El mosquitero musical (Phylloscopus trochilus).
No faltaron los habituales gorrones que sólo buscan comida, como el carbonero común (Parus major)...
... el verderón (Chloris chloris)...
También acudieron las currucas, como esta curruca capirotada (Sylvia atricapilla)
O este ejemplar joven de curruca zarcera (Sylvia communis)
Pero la sorpresa del día en el bebedero fue esta pareja de colirrojo real (Phoenicurus phoenicurus).
El macho, mucho más tímido, se acercó poco.
La hembra, mucho más descarada, no dudó en posar y pegarse un buen chapuzón.
Y claro, como un baño da hambre, después se tomó un aperitivo de insectos en los alrededores.